Balinet (2963 mts)

Desde el Plan de Tabernes, al fondo Culfreda, y más a la derecha Balinet

Hoy íbamos a ir al Peguera (2900 y pico) desde la Torre de Cabdella, pero Carli se ha puesto malo y al final hemos ido al Hostal de Salinas para intentar al día siguiente los Picos de La Pez desde Tabernés. Llegados al pie del collado, nieve y más nieve. Subimos la primera rampa, todo tieso, ni rastro de huella, atravesamos un zócalo de hierba resbaladiza. Nos enfrentamos a la siguiente rampa, más tiesa todavía, y no nos gusta. Una capa de fina nieve deslizante sobre hierba deslizante. Más de 45º y un patio considerable a nuestros pies. Los crampones resbalan. Nada, para abajo, y como lo que nos falta de valor lo suplimos con tesón (anda con la frasecita), nos vamos a "explorar" la vertiente O. de este solitario valle de La Pez.




Cabaña de pastores de Culrrueba
A partir de 1900 mts. hay una gran cantidad de nieve
Puerto de La Pez. El sendero de verano describe zigs-zags en la pendiente, pero ahora es una auténtica muralla nevada
Pasado el zócalo de hierba intermedio la pendiente aumenta y la calidad de la nieve empeora
Nos retiramos, no nos sentimos seguros. Descenderemos al llano y ya veremos......
Nos quedamos muy cerca del Puerto. Al fondo izquierda se divisan Las Puntas de La Pez
Descendemos al llano a 2100 mts, y basándonos en el mapa de la Alpina, como hacíamos en los 80, con todo su entramado de nombres repetidos, cotas inexistentes, puertos fantasmas y caminos indescifrables empezamos a ascender por una vaguada en dirección oeste sin más objetivo que intentar llegar a algún collado de la cresta fronteriza. Avanzamos sin descanso por una especie de vallejo completamente nevado sin saber a donde nos conduce. Por fin llegamos a un rellanop (2650 mts según el altímetro de Rafa) que llamamos el vivac de la amistad, porque hace falta ser amigos para venir hasta aquí. Vemos enfrente y completamente nevado el Culfreda, y con ayuda del mapa observamos un pico bastante asequible a la derecha que es el Balinet (2963 mts). El terreno hacia la cima parece despejado. Valoramos subir Culfreda, pero recordamos las laderas pizarrosas que ahora podrían ser peligrosas por la nieve del descenso del Cauarère hasta el Puerto de La Madera, y el Balinet nos atrae por ser una zona más desconocida, así que allí nos iremos. Descansamos un poco y para arriba, hacia el oculto Pas du Balinet, que nos dará acceso a la rampa final.



Ascendiendo rumbo al O. Al fondo Macizos de Posets y Eristes
Cordal Picos de La Pez - Bachimala
Nuestro llamado "Vivac de la Amistad". La tentadora cara E. de Culfreda
El Balinet parece un objetivo fácil. Son ya las 15,30 h.
Nos dirigimos siempre hacia el oeste y pronto vemos que no hay ningún problema para alcanzar el Pas de Balinet, a 2750 mts. Ahora ya sólo nos queda crestear por una ancha loma que tan sólo al final se estrecha algo. Ni rastro humano, ni huellas, ni basura, ni tan siquiera mojones. Muy poco gente debe transitar por estos lares, tan sólo los que hagan travesía de Culfreda a Loustou, pero nos da la impresión que hace ya muchas semanas que nadie se ha perdido por aquí. A la
izquierda vemos ya  el impresionante verdor del valle de Rioumajou. A las 16,25 h. llegamos a la cima. Aquí si encontramos un gran mojón. La vista es fantástica, aunque hay algunas nubes en Francia.

Llegando al Pas de Balinet (2750 mts). En el centro de la foto el rellano "Vivac de la Amistad"
Avanzando por la cresta. Al fondo impresionante cara norte de Culfreda
Hacia el oeste. Gran cantidad de nieve en el Cuello Robiñera y macizo de La Munia
Pico Balinet (2963 mts)
Al fondo Loustou, y a la derecha Guerreys
No estamos mucho rato en la cima, es tarde, y aunque la luz aguanta  en estos días de Junio, el viaje se presupone muy largo hasta Zaragoza. Iniciamos el descenso por el mismo itinerario hasta el Pas de Balinet, pero luego hacemos un descenso directo por una vaguada nevada sin parar hasta el fondo del Valle de La Pez. Hemos tenido buen tino, ya que aparecemos en el valle justamente antes de que la nieve deje paso a un embravecido Cinqueta de La Pez. Ya por el sendero, lo único que nos intranquiliza algo es el paso del torrente que se despeña de los ibones de Bachimala, y que ya por la mañana me había hecho descalzarme y darme un buen chapuzón. Ahora la cosa ha ido mejor, un buen salto sobre las espumosas aguas y listo. Más tarde descendemos al gran llano presidido por el viejo pluviómetro y poco más, un agradable retorno por el formidable bosque.



Descendiendo ya por el Valle de La Pez
Estamos felices, hemos convertido una derrota en una fantástica excursión hacia lo desconocido y con un gran resultado. Efectivamente tiene razón Rafa, nos ha faltado valor, pero lo hemos suplido con tesón.

30 Junio 2013. Rafa y Enrique