Es fácil recordar datos cuantitativos como nombres de picos, altitudes, desniveles, orientaciones, acotaciones geográficas, coordenadas GPS, grados de dificultad en diferentes escalas ... nos sobran mediciones y este blog es sólo para guardar pequeños detalles que sirvan para pulsar el nodo neuronal que dispara en nuestro cerebro evocaciones, recuerdos, sensaciones, sugerencias y demás impresiones cualitativas

2024-07-17

Besiberri S (3023 mts), Malavesina N. (3009 mts), Comaloforno (3029 mts)

 

Travesía desde Besiberri S. hacia Malavesina N y Comaloforno

Hemos pasado la noche en el bonito refugio de Conangles, a pie de carretera, un poco antes de la boca sur del túnel de Viella. Aparcar el coche junto al refugio tiene sus ventajas, ya que lo que no necesitamos para la ascensión lo dejamos en el coche, incluso los crampones, que pesan. El refugio estaba tranquilo la noche anterior, tan solo contamos diecisiete personas, así que Rafa y yo pudimos disfrutar de un dormitorio para nosotros solos. Pero antes de eso tuvimos una espléndida cena e incluso pudimos ver la primera parte del partido España – Francia. Eso sí, a las 22 h. toque de silencio riguroso.



Partimos del refugio en dirección sur por una pista que atraviesa el precioso bosque de Conangles durante 1 km, abandonando a nuestra izquierda por una señalización que toma un sendero con postes amarillos que cruza repetidamente la pista. Ascendemos por un buen camino empinado en dirección este. Precioso bosque de pinos junto al río que se despeña en múltiples cascadas a nuestra derecha. Al cabo de una hora de marcha cruzamos el torrente por una pasarela de cemento y salvamos el último repecho por un sinfín de lazadas en fuerte pendiente que acaba en el paraje donde se ubica el Estany de Besiberri, lugar idílico como pocos. Ahora el sendero discurre llano junto a la misma orilla hasta la otra punta del lago, donde una gran pradera con algunos pinos ofrece un paisaje único.

Después de llanear por la pista, tomamos el sendero balizado en ascenso

Llevamos una hora de marcha y cruzamos el barranco de Besiberri

Estany de Besiberri

Vaya paisaje, el del entorno del Estany. Al fondo el Feixant

Continuamos avanzando en suave ascenso por sendero entre prados, ya con la vista puesta en el refugio metálico de Besiberri, el cual quedará a la izquierda por encima de nosotros. Vemos algunos hitos que invitan a cruzar a la otra orilla, pero la corriente es exagerada, así que seguimos por la margen izquierda hasta llegar a la altura del Estanyet, donde el río se parte en varios  brazos haciendo asequible el cruce, que lo hacemos junto a un enorme bloqué errático de dimensiones descomunales. A partir de este punto, abandonamos la muralla que teníamos enfrente e iremos a la izquierda para ganar altura por un canalón penoso que nos hace sudar de lo lindo, apareciendo ya en la ladera oeste de la cresta de los Besiberris.
Dejamos a la derecha la muralla que protege el Estanyet

Subiremos hacia la izquierda rodeando la muralla...

...por un canalón de fuerte pendiente que nos hace sudar bien...

...hasta que salimos a una zona más amable

Al fondo, al sur vemos la morrena que nos tocará superar. Antes, en las últimas praderas que encontrarmos hacemos un descansillo y aprovechamos para comer algo. Emprendemos la subida, ya por roca cada vez de mayor tamaño penetrando en la morrena abandonada por el glaciar en su último empuje durante la Pequeña Edad del Hielo. A duras penas dejamos atrás el roquedal y tomamos los neveros. La nieve no está ni muy dura ni muy blanda, pero los crampones nos hubieran ido bastante bien, la prueba es que aprovechamos una huella de crampón de gente que nos ha precedido, menos mal.
Primeros neveros junto a la morrena. Al fondo, Abellers

Terreno caótico. Hacia el fondo vamos, al collado de Abellers

Por fin salimos de la morrena y seguimos por los neveros hacia el collado

Los neveros van aumentando de pendiente y ya tenemos enfrente el cordal que une el Besiberri S y el Abellers (toda la vida lo habíamos conocido como Avellaners, y así figura en los antiguos mapas). Bueno, a lo que vamos, en el cordal divisamos un poste, que suponemos es el collado, pero para llegar hasta allí tenemos un empinado corredor completamente nevado, y sin embargo a la izquierda, una pala de nieve finaliza en una gravera que alcanza el cordal, un poco más elevados que el collado. Penosa ascensión, un paso adelante, dos atrás. Alcanzamos por fin la ladera del Besiberri, del que nos separan todavía unos 150 mts. que se nos hacen muy largos.
Al fondo ya se perfila el cordal. Nosotros evitaremos el nevero de la derecha y ascenderemos por la pedrera a su izquierda


La subida por la gravera es penosa. Un paso arriba y dos abajo.

Por fin aparecemos, aunque algo más arriba del collado de Abellers

Ladera oeste del Besiberri S. Pedregosa, pero más noble que el canalón

Casi estamos ya. Al fondo, las dos cumbres del Besiberri del Mig

Algo más de cinco horas y media desde Conangles, alcanzamos la cima del Besiberri S. Encontramos allí una chica con la que charlamos. Su compañero ha ido a hacer la Malavesina N y el Comaloforno, justo lo que nosotros pensábamos hacer, aunque ahora ya tenemos alguna duda de seguir o no. Enseguida vemos al susodicho regresando del Comoloforno, ascendiendo la aguja y bajando en un periquete. Y es que la Malavesina la tenemos justo aquí al lado. Así, que esperamos a que llegue hasta nosotros, y después de cambiar impresiones nos bajamos para abajo, tan solo unos metros al oeste, ya que un hito nos indica la travesía hacia la aguja.
Besiberri Sud. 3023 mts

Hacia el Este. Macizo de Punta Alta

Próximos objetivos. Malavesina y Comaloforno

Besiberri Nord

Un pequeño diedro hemos de trepar para llegar a la brecha. Desde aquí, por la vertiente este, por unas fisuras alcanzamos la arista, muy breve, pero aérea,  llegando enseguida a la cima. Fotos, y para abajo. Ahora enlazaremos con el sendero “general” que comunica con el collado de Abellers. Enfrente tenemos el Passet, que hicimos hace años, cuando era un tresmil, decotado más tarde a 2998 mts. El Passet, un pico serio. Vamos girando en ascenso fuerte hacia la izquierda siguiendo los hitos, que los hay por todos sitios. Alcanzamos por fin el Comaloforno, tras una breve arista. Vistas increíbles, sobre todo hacia el norte, con toda la cresta de los Besiberris. Al oeste, el macizo de las Maladetas, bastante más blanco que los últimos verano.
Trepamos un pequeño diedro y ganamos la brecha al norte de la Malavesina. Al fondo Besiberri S

Corta trepada algo aérea

Una breve arista nos deja en la cima de la Aguja N. de Malavesina

Aguja N. de Malavesina. 3009 mts

Besiberri S. y cresta hasta el Besiberri N.

Estanys Gelats

Cresta hacia Comaloforno

Pic Abellers. Al fondo Montes Malditos

Rumbo al Comaloforno. Passet (2998 mts)

Últimos metros al Comaloforno


Comaloforno. 3029 mts

Besiberri Sud, Mig y Nord

Nos vamos pitando, ya son las 14 h. y nos queda toda la bajada, que se nos va a hacer muy larga. De vuelta hacia el collado de Abellers, subidas y bajadas pedregosas que van aumentando el desnivel acumulado. Por fin, alcanzamos la brecha por la que hemos accedido al Besiberri esta mañana. Encontramos allí a un montañero que viene de Caldes y va hacia el refugio de Besiberri. Bajamos los tres malamente por la escurridiza gravera en dirección a la nieve, que alcanzamos seguidamente. Ahora la nieve está muy humidificada y resbala mucho, unido a que debajo está la gravera movediza hace que todo sea un auténtico tobogán. Yo me caigo y voy resbalando hasta que con ayuda del piolet me detengo. Poco a poco la pendiente va cediendo, pero el otro montañero, sin piolet y con crampones baja bastante aterrorizado y se queda atrás.
Bajamos del Comaloforno y subimos canalones

Y bajamos canalones

Pasamos el collado Abellers y descendemos por la penosa gravera inestable

Ahora, ya por nieve más noble descendemos rápidamente, enlazando todos los neveros que podemos hasta acabar de nuevo en la morrena. Sin problemas la pasamos y poco después llegamos a la bajada del canalón “cabrito” de la mañana, que nos deposita en el llano, junto al Estanyet. El camino hasta el Estany de Besiberri se hace muy largo, parece que está siempre a la misma distancia, pero por fin llegamos y hacemos un buen descanso junto a la orilla, en la hierba, donde nos tumbamos unos minutos. Qué lugar tan bonito. Y ya solo nos quedan los 500 mts de desnivel descendiendo el barranco hasta llegar a la pista. Agotados la alcanzamos, y el último kilómetro hasta el parquin lo hacemos en “modo avión”, sin apenas hablar y desconectados. Por fin, el coche. Han sido 12 horas, con 1700 mts de desnivel, y 15 km. Con razón estamos cansados.
Descendemos todo lo que podemos por neveros, pero no nos libramos de la morrena

Por fin pisamos terreno amable. Arriba se ve perfectamente el amontonamiento de la morrena

El Estany de Besiberri muy lejos todavía



Al fondo ya vemos el Estnyet y el enorme bloque, junto al que cruzaremos el río

Sin comentarios

A la vuelta, paramos en Serraduy, en Casa Peix, y se obró un milagro, tras una jarra de cerveza con limón, un café y una increíble tarta de manzana estábamos dispuestos a empezar de nuevo. Y no fue el único milagro, ya que justo antes de trepar la Malavesina, Rafa se da cuenta de que ha perdido el móvil. El terreno es un caos de roca, sin sendero; vamos, imposible encontrarlo. Retrocedo unos metros sin saber si hemos pasado por allí, y cuando le voy a decir a Rafa que se olvide del móvil, miro una grieta y allí estaba, de pie, tan solo se veía el canto, pero apareció. Otro milagro.

10 Julio 2024. Rafa, Enrique

2024-07-08

Baciás (2758 mts)

 


De las montañas que rodean el Balneario de Panticosa, la única que no tiene la mágica cifra de 3000 y que aún así es frecuentemente visitada es el Baciás, quizás por su carencia de dificultad (en verano) y por el bonito itinerario que discurre hasta alcanzar la cima, así como las estupendas panorámicas que se disfrutan desde su cumbre.

Fernán y yo partimos del Balneario por la escalinata a la izquierda de la Fonda Belio, que amenaza ruina, rodeada de otros edificios ya caídos. Una pena. El itinerario es GR y está profusamente balizado. Enseguida vamos cogiendo altura, salvando un desnivel de 700 mts, y llegando al ibón represado de Brazato Superior. Durante la ascensión hemos disfrutado de buenas vistas sobre las Argualas, Garmo Negro e Infiernos, mucho más innivados que los últimos años. También han estado en todo momento presentes las Forátulas, Tablato, Torre, y Pico Brazato.

Todavía entre nubes, Garmo Negro, Pondiellos, Infiernos

Al fondo, Infiernos y Agujas de Bachimaña

Ganamos altura rápidamente

Barranco de Brazato. Al fondo Tablato y las tres cimas del Forátulas

Detrás de Fernán, Forátulas y al fondo, La Partacua

Zoom a Argualas y Garmo Negro, con abundante nieve todavía

Junto a la orilla hacemos un descanso y aprovechamos para comer algo, antes de continuar con el ascenso dejando el ibón a la derecha. Una fuerte subida  hacia el norte nos deja en el llano donde se encuentran los ibones Altos de Brazato, que dejamos a la izquierda. Aparecen los primeros neveros, justo antes de llegar al collado Alto de Brazato, donde descubrimos la mole del Vignemale y el circo del Río Ara, con la cresta de Chabarrou y el Pico de les Ouletes. Nos cruzamos con algunos montañeros que al ir con zapatillas han desistido de atacar la cumbre del Baciás. Y es que a partir de aquí los neveros se extienden hasta cerca de la cima.

Ibón de Brazato Superior. Al fondo Torre de Brazato y Tablato

Se aprecia la ruta a seguir hacia los Altos Brazatos. Al fondo Pico dero Puerto y Baciás

Enseguida tomamos altura sobre el lago, en dirección a los Altos Brazatos

El GR y el torrente comparten itinerario

Ibones altos de Brazato

Primeros neveros, poco antes de llegar al Collado Alto de Brazato...

...desde donde descubrimos el imponente Vignemale

Vertiente del Ara, con la cresta de Chabarrou, Puerto de los Mulos y Pico des Oulettes

Nosotros no hemos traído los crampones, pero si piolets, así que dando buenas patadas a la nieve para hacer huella ascendemos en dirección a la cumbre, todavía algo lejana. Algún nevero más empinado nos hace emplearnos a fondo, pero aún así, sin ninguna dificulad alcanzamos la cresta sur, por la que ya a través de pedrera alcanzamos la cima.

Desde el collado ya tenemos a la vista la cumbre del Baciás

Al principio ascendemos suavemente por neveros

Aunque poco a poco la pendiente va aumentando

Hacia el Norte destacan los Dientes de Batanes y más a la derecha Las Neveras

Las nubes van y vienen sobre las montañas vecinas, pero aún así nos dejan imágenes preciosas. Nos encontramos sobre el ibón de Brazato Superior, por el que hemos pasado hace poco. A lo lejos, el valle del Ara, divisando incluso la cabaña de Cerbillona, y encima de ella el Vignemale, inmenso. A ratos vislumbramos las cumbres del circo de Panticosa, Garmo Negro, Argualas, etc. Al norte, los Batanes parecen inexpugnables. La temperatura no es fría y se está bastante bien en este mirador.

Circo del Río Ara

Hacia el Oeste, en primer término Pico dero Puerto, entre el Brazato Superior y los Altos Brazatos

Zoom hacia el sur. Peña de Otal

Ibones de Espelunz y valle del Ara

Vignemale

Zoom hacia La Facha, Peña Aragón y Petite Facha

Media hora después iniciamos el descenso, pero ahora seguiremos por la arista hacia el Pico dero Puerto para evitar los neveros más empinados. La única dificultad es el descenso de un pequeño resalte en el que hay que destrepar y nos deposita ya en el collado. Seguimos por neveros sin apenas desnivel saliendo enseguida al Collado Alto de Brazato, donde enlazamos con el itinerario de subida. Llegamos con el tiempo justo al Balneario, y es que tenemos obligaciones familiares. Aún así sacamos cinco minutos para tomarnos una radler en la Casa de Piedra.

Ahora descenderemos por la cresta oeste...

...fácil, aunque hemos destrepado un pequeño resalte antes de llegar al collado...

...alcanzando los neveros ya bastante abajo, cerca del collado Alto Brazato. Al fondo Llena Cantal, Gaurier y Punta Zarre

Nos despedimos ya del Vignemale. En primer término, ibón de Batanes



La Partacua


Un bonito día de montaña. Una cumbre que ya había ascendido en dos ocasiones, pero de la anterior ya habían pasado veinte años. Ya tocaba volver al Baciás.

21 Junio 2024. Fernán, Enrique

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