Es fácil recordar datos cuantitativos como nombres de picos, altitudes, desniveles, orientaciones, acotaciones geográficas, coordenadas GPS, grados de dificultad en diferentes escalas ... nos sobran mediciones y este blog es sólo para guardar pequeños detalles que sirvan para pulsar el nodo neuronal que dispara en nuestro cerebro evocaciones, recuerdos, sensaciones, sugerencias y demás impresiones cualitativas

2017-11-21

Peiró (1579 mts)

Peiró, desde Arguís
Muchas veces al pasar por Arguís camino del Monrepós hemos girado la cabeza a la izquierda y siempre hemos visto al fondo del valle el Pico Peiró curiosamente adornado por estratos verticales. Es una excursión corta, para esos días en que sales con idea de volver a casa a comer. Hoy es uno de esos días. El viento del norte azota con fuerza y según la previsión aumentará. Avanzamos con el coche por la antigua carretera de Monrepós. Al poco de pasar el caserío de Arguís tomamos a la izquierda el desvío hacia Rasal y poco después una pista con indicación. Estamos en el collado de Labarza, divisoria de aguas entre Arguís y el Garona. Dejamos a la izquierda la pista de las Calmas y poco después aparcamos junto al poste indicador de la ruta.
El comienzo, tieso tieso, hacia el sur. Atravesamos bosque de pinos y bojes. El sendero trepa sin compasión, apoyado por una serie de escalones de madera (parece ser para frenar la erosión). El Peiró siempre presente a nuestra derecha. El camino empieza a perder inclinación y llegamos a una zona casi descendente, donde hay una serie de barandillas de madera y otras metálicas cuya función no está muy clara, ya que no hay ningún peligro.



De nuevo ascendemos y entramos en un bosque de hayas, según dicen el más meridional del Pirineo. Buenos ejemplares de árboles ya desnudos por lo avanzado del otoño. El suelo se ve húmedo, y eso que atravesamos una severa sequía. Estamos en vertiente norte y aquí al sol de momento no se le espera en varios meses. Un desvío señalizado nos indica que debemos girar hacia la derecha, dejando el bosque de hayas que trepa hacia arriba en dirección sur. Según la señal, dirección collado Sarramiana.



El bosque da paso a matorral de boj y erizones. El camino se vuelve terroso y algo más abrupto al tiempo que se acerca al collado de Peiró. Aún así muy fácil hasta el colladito (1500 mts), donde nos recibe un viento helador.


Embalse de Arguís
Collado previo a la cima (1500 mts)
Vemos ya el valle de Garona, con Bentué de Rasal a nuestros pies, y bastante más al oeste Rasal. Entrevemos también el Pusilibro, el más alto de la zona (1595 mts) coronado por la boira.
El camino continúa hacia la cumbre revolviéndose en zigzags y alcanzando en breve la larga cima, cuya cúspide, como suele ser lo habitual se sitúa en el punto más alejado (1579 mts).
La situación de norte hace que las nubes abunden hacia el Pirineo. Aún así, esporádicamente permiten ver las cumbres más altas, Collarada, Partacua, Tres Sorores, etc. Hacia el Sudeste la mole de Gratal asoma detrás del collado de Sarramiana. El viento nos azota con fuerza y la sensación térmica es bastante baja. Después de estar un buen rato en la cima emprendemos el regreso.

Ya cerca de la cima, vemos al fondo el bosque de hayas, Collado Sarramiana y Gratal

Arista final

Cima (1579 mts)

Tres Sorores


Valle del Garona. Pusilibro (1595 mts) tapado por la niebla

Fuerte viento

Hacia el Este, Arguís


Descendemos rápido y enseguida de nuevo en el colladito. Hemos leído que se suele ir cresteando hasta el collado de Sarramiana. Sería un buen colofón a la jornada, ya que se nos ha hecho muy corto. No se ve ni rastro de senda. Empezamos avanzando penosamente entre erizones y bojes en dirección al cresterío cercano. El viento es exagerado y el collado se ve lejano. Lo dejaremos para otra vez.
Iniciamos el descenso



Descendemos de nuevo por el camino de subida, y al llegar al bosque de hayas decidimos hacer un poco más y tomar el camino que sube al collado de Sarramiana. Así completamos la excursión. Ascendemos fuertemente al sur, de nuevo por escaleras y barandillas que no sirven para nada. Ahora si que estamos recorriendo todo el bosque. Realmente es espectacular, hay grandes ejemplares de hayas que se ven silueteados a contraluz.





 En menos de 20 minutos llegamos al collado. Estamos a medio camino entre Gratal y Peiró. Vemos también el sendero que proviene del collado de Peiró, y además observamos que un numeroso grupo que habíamos visto en Peiró han elegido esa ruta circular. Bueno es saberlo.

Gratal, desde collado de Sarramiana
Unas cuantas fotos y de nuevo para abajo, ahora ya por terreno conocido hasta el coche. En el descenso encontramos varios grupos que ascienden. La gente no madruga mucho, o no tiene prisa. Nosotros sí. 

Collado de Sarramiana. Al fondo, Peiró



Aún tendremos tiempo de tomar una caña en Arguís y llegaremos a comer a Zaragoza. Una buena matinal
11 noviembre 2017. Marta, Fernán, Enrique
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